Agenda QR
En una entrevista exclusiva para Agenda QR, la Dra. Arlene Ramírez Uresti, internacionalista y académica de la Universidad Iberoamericana, analizó el impacto que la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca tendrá en México, especialmente en el contexto migratorio. Durante la conversación con el periodista Javier Vite, Ramírez subrayó que las órdenes ejecutivas del presidente estadounidense traerán consigo retos significativos para el país, particularmente en la atención de migrantes.
La Dra. Ramírez Uresti destacó que el tema migratorio es de suma preocupación, ya que, según Trump, se contempla la deportación de hasta 15 millones de migrantes. “Aunque deportar a esa cantidad de personas es prácticamente imposible, sí es plausible que se lleve a cabo la deportación de un millón. Esto generará una crisis humanitaria en México, pues muchos de estos individuos no son solo mexicanos, sino que provienen de diversos países y quedarán atrapados en nuestro territorio”, afirmó.
Además, la académica hizo hincapié en que la infraestructura y los recursos de México son insuficientes para atender a los migrantes varados que ya se encuentran en el país. “Desde la crisis migratoria anterior, hemos tenido a muchos migrantes de otras nacionalidades que han permanecido en un estado de limbo. Con la reactivación del programa ‘Quédate en México’, la presión sobre nuestros sistemas de salud y atención social se intensificará”, advirtió Ramírez Uresti.
La Dra. Ramírez también señaló que, aunque muchos migrantes están regresando a México, su intención no es quedarse. “Estamos viendo que las personas deportadas no buscan asentarse aquí, sino que planean regresar rápidamente a Estados Unidos. Es fundamental que México desarrolle condiciones que fomenten la integración de estos migrantes, ofreciendo educación, empleabilidad y atención médica adecuadas”, subrayó.
Finalmente, la internacionalista subrayó que el deterioro de las relaciones entre México y Estados Unidos es un resultado de años de tensiones y falta de cooperación. “La actitud actual de ambas naciones refleja un distanciamiento que podría complicar aún más la situación migratoria. Necesitamos un enfoque más colaborativo para enfrentar estos desafíos”, concluyó. La situación en la frontera y la gestión de flujos migratorios en México se perfilan como temas críticos en el futuro inmediato.
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