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En un dramático giro de los acontecimientos, la Escuela Secundaria General 8 de marzo, ubicada en la región 255 de Cancún, enfrenta una crisis de seguridad. Padres de familia han alzado la voz, exigiendo medidas urgentes para proteger a los estudiantes.

La solicitud de apoyo policiaco, presentada el pasado viernes 1 de marzo, revela una realidad inquietante: disparos en horarios de clases. La integridad de los alumnos está en juego, y la comunidad educativa no puede permanecer indiferente. El director, José Couoh Cabrera, ha suscrito el documento que subraya la necesidad imperante de vigilancia permanente en los alrededores de la institución. Actos vandálicos y la amenaza latente de situaciones peligrosas, como los disparos con armas de fuego, han generado alarma entre los padres de familia.

En un encuentro crucial, el Capitán Carlos Ernesto D’Amiano Sumuano se comprometió a implementar operativos de vigilancia. La integridad de los alumnos, maestros y padres está en juego, y la comunidad espera resultados concretos. La pregunta persiste: ¿será suficiente para calmar los temores y proteger a nuestros jóvenes?.